Entre pinceladas invisibles un estanque impresionista en la Ciudad Seki, Prefectura de Gifu

El santuario de Nemich en japón, ofrece una maravillosa contemplación a un increible paisaje que parece estar sacado de una impresionante pintura.

El Santuario Nemichi

Ubicado en Itatori, Ciudad Seki, Prefectura de Gifu, es un santuario de pueblo construido para adorar a dioses sintoístas, está rodeado entre hermosas montañas y ríos que crean un lugar resplandeciente. Este santuario se ha hecho famoso en los últimos años por “El estanque de Monet” que se ha comparado con la serie de pinturas “Les Nymphéas” que Claude Monet dedicó a los nenúfares del estanque de su jardín en Giverny.

A finales de la década de los 90 el estanque que originalmente fue diseñado como un embalse de riego se había deteriorado. En consecuencia, la comunidad se encargó de limpiarlo y lo llenaron con agua cristalina del monte Koga, poco a poco fueron sembrando nenúfares las cuales fueron acompañadas por hermosos peces Koi de colores que lo convirtieron años después en un lugar perfecto para la contemplación.

Pese a que se popularizó como «Estanque Monet» es mejor conocido como «Estanque del Santuario de Nemich» o «Estanque sin nombre». Este bello lugar se difundió en el año de 2015 a través de una fotografía publicada en redes sociales que se viralizó y muchos usuarios inmediatamente empezaron a compararlo por su parecido a la serie de pinturas “nenúfares” que hizo Monet.

Aunque es verdad que la pintura guarda cierta simulitud con el estanque, podemos decir que su belleza es realmente incomprensible. A diferencia de una pintura de oleo en galería, aquí en el estanque el lenguaje artístico es complejo y cambiante, ya que la vista de carpas de colores nadando en el agua azul, que es tan transparente que puedes ver claramente las plantas acuáticas en el verde tranquilo, es como si hubiera salido de una pintura. No puedes evitar suspirar ante la belleza.

El color del estanque cambia con la rotación del sol y el agua situada en él. Los nenúfares florecen desde finales de mayo hasta el mes de octubre (mayor floración entre junio y julio). Las hojas rojas de los nenúfares se pueden apreciar de diciembre a julio e incluso a finales de mayo se puede ver el transitar de las luciernagas. También puedes disfrutar del paisaje creado por las hortensias y hojas de arce que adornan el estanque.

Cinco lugares mágicos para recorrer los alpes Japoneses

Estas opciones son ideales si quieres visitar la zona de los alpes japoneses. Hemos realizado una selección de cinco pueblos que debes incluir en tu próximo viaje a Japón y que puedes disfrutar en cualquier época del año.

Nagano (長野市)

Nagano está ubicado en Honshū, Japón. Las zonas montañosas con las que cuenta el paisaje lo hacen espectacular y un lugar precioso para contemplar los alpes japoneses. Fue sede de los Juegos Olímpicos de Invierno en 1998, lo que lo hace merecedor de ser un lugar perfecto para practicar deportes de invierno.

Además de los deportes de invierno, en Nagano puedes practicar senderismo en las montañas o visitar el Parque Natural Tsugaike, en primavera florecen hermosas flores de colores y en otoño el paisaje amarillea y se vuelve absolutamente sorprendente. En Nagano también puedes visitar el templo Zenkōji, uno de los más populares e importantes de Japón.

Cerca de Nagano también se puede visitar el Parque de Monos Jigokudani, uno de los más deseados por los turistas. El inicio del recorrido se hace atravesando la montaña hasta llegar a las aguas termales donde en invierno podrás ver bajar a los monos de las frías montañas a calentarse en las aguas termales. Sin duda, es todo un espectáculo.

Magome – Juku ( 馬籠宿 )

Es un pequeño pueblo ubicado en las montañas, en la antigüedad era un importante camino utilizado por los señores feudales y los comerciantes que conectaba Tokio y Kioto en el período Edo (1603-1868).

Es el lugar ideal para tomar las mejores postales desde principio a fin del recorrido, sus calles en adoquín, sus canales y sus molinos de viento en funcionamiento, además de la arquitectura propia de la época lo convierten en un lugar impresionante y maravilloso. Para ir a Magome puedes ir de Tokyo a Nagoya y de allí tomar el JR Shimano hasta la estación Nakatsugawa o desde Tokyo hasta Shiojiri y de allí de nuevo el JR Shimano.

Shirakawa-go (白川郷)

Este pueblo ubicado en el centro de la isla de Honshu, fue declarado patrimonio de la humanidad por la UNESCO en 1995. Sus casas conservan el estilo arquitectónico japonés gassho-zukuri, por lo cual fue otorgado este reconocimiento. El valle parece salido de un cuento fantástico, estas viviendas cuentan con más de 200 años de antigüedad. 

Kanazawa (金沢市)

Este destino es ideal para aquellos viajeros que buscan encontrarse con un poco de historia del periodo Edo, pues cuenta con museos de arte y artesanías tradicionales de la época. Uno de los lugares más visitados es el parque Jardín Kenrokuen, que cuenta con un área de 11,4 hectáreas y que está ubicado en lo alto de la parte central de Kanazawa y es considerado como uno de los más lindos de Japón. Y sin duda, uno de los sitios más hermosos por conocer.

Furukawa (古川 高晴)

Cerca de Takayama se encuentra Furukawa anclado en las montañas de Gifu, un lugar histórico muy valioso para Japón y declarado por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad. Este pueblo se destaca por sus muros de piedra y por el canal del río Seto donde habitan miles de carpas (peces) de colores que brindan todo un espectáculo por casi 400 metros que atraviesan el casco antiguo. Furukama es un lugar muy tranquilo para quienes lo visitan.

Hanami, la tradición japonesa de contemplar los cerezos

Japón se convierte en un país aún más especial cuando llega la primavera y el florecimiento de los cerezos cubre de rosa todo el país. La relación de los nipones con la naturaleza es fascinante, pues los japoneses se han integrado con el medio natural entendiendo que el ser humano no puede pretender de manera ambiciosa imponerse sobre ella, si no debe concebirse como un elemento más del universo.

Y es que cuando florecen los cerezos, japón disfruta de un espectáculo natural increíble, y con este fenómeno una tradición milenaria llamada hanami. El Hanami 花見 significa contemplar las flores, en este caso, las de cerezo. Habitualmente se acostumbra a realizar un picnic debajo de un árbol de sakura para apreciar la belleza de las flores; la comida, bebidas y música no pueden faltar para hacer de este momento una ceremonia de gran importancia. El significado de esta tradición está asociado a recibir la primavera y a los nuevos comienzos, este espectáculo solo se puede realizar durante 7 o 10 días cada año dependiendo de la ciudad y el florecimiento de estos.

El hanami continúa en la noche y se conoce como Yozakura, donde los cerezos iluminados son los protagonistas.

Significado de la flor de cerezo

La flor de cerezo o sakura es para los japoneses una flor especial, florece los últimos días del mes de marzo, abril y en otras ciudades la primera semana de mayo. El significado de la flor está influido por el budismo y está asociado con la temporalidad, el carácter pasajero de la belleza y la vida, siendo asociada con el renacer. Para los antiguos samurais, la flor de cerezo representa la sangre, la fragilidad y lo efímero asociado al sacrificio y a la vida de los samurais.

El kanji (桜) con el que se escribe la palabra sakura tiene los radicales árbol, mujer y agua.

El kanji (桜) con el que se escribe la palabra sakura tiene los radicales árbol, mujer y agua.

La Agencia Climática Nacional cada año realiza un pronóstico con los días de máxima floración en todo el país. Para este año se espera que los cerezos florezcan desde el oeste de Japón hasta la región de Kanto a la par que en años normales. El pronóstico para este año es el siguiente:

Si alguna vez has pensado viajar al país nipón, te recomendamos que lo hagas en la época del florecimiento de los cerezos, los cuales podrás encontrar en todo el territorio. Al entrar en contacto con esta experiencia te darás cuenta que no siempre lo importante es aprovechar cada segundo para recorrer un nuevo lugar y buscar un nuevo destino cada día. Como turista te darás cuenta que la magia puede estar en el hecho de sentarte durante horas a contemplar como los cerezos lo llenan todo de color.

El Hanami te invita entonces a vivir una experiencia auténticamente japonesa, a olvidarte de todo aquello que no es importante y a apreciar la belleza de la vida, de lo efímero, de que la armonía de vivir se puede encontrar en acciones tan pequeñas como la observación y el disfrute de las pequeñas cosas de la vida.